Afligido y sonrojado

Hace ya casi una semana desde que una turba enfervorecida acorraló, alanceó, y definitivamente remató con un destornillador a un indefenso toro en la localidad española de Tordesillas. Poco puedo añadir a lo ya dicho y leído en todos los medios disponibles. De nuevo hemos hablado todos públicamente por voz de las plumas de Ruth Toledano y Rosa Montero y hemos visto que la noticia se ha extendido un año más por la televisión y sobre todo por las redes sociales. No me siento con fuerzas de escribir sobre el sufrimiento de Afligido, él ya descansa tras su agonía.

Pero sí hay dos cuestiones que a día de hoy me sonrojan y que creo que se deben destacar. La primera de ellas es la respuesta de las personalidades (diputados y ministros) del partido socialista que fueron preguntados por un reportero de La Sexta, vídeo en mano, sobre la celebración del Toro de la Vega. Me siento sonrojado y avergonzado al ver como escurren el bulto y dan sus supuestas opiniones personales al respecto. Los Diputados, que han sido elegidos por el pueblo, tienen encomendada la labor de promover y someter a votación las leyes que rigen la convivencia entre los ciudadanos. Los Ministros, que por contra no han sido elegidos por los ciudadanos sino por el Presidente del Gobierno, tienen potestad legislativa propia, es decir, pueden dictar normas, en forma de Ordenes Ministeriales y Reglamentos etc.  con el fin mejorar las condiciones de vida y convivencia de los españoles. Cuando unos y otros son preguntados parecen querer salvar su dignidad personal posicionándose en contra de la barbarie desde un plano personal, pero no metiéndose lo más mínimo en la órbita de lo oficial. 

El mensaje que se transmite es cristalino, una cosa es lo que yo piense y otra muy distinta es como ejerza mis responsabilidades, que por otra parte son altísimas. Y si ustedes no están ahí para hacer de nuestro país un lugar más justo, si no están ahí para luchar por las cosas que creen...¿para qué están?

Cuando una persona llega en su vida a un punto profesional como el de ser Ministro parece normal pensar que es una persona con altas dosis de capacidad de trabajo y con una clara vocación de sacrificio y de servicio público. Y, por añadidura, es una persona que ya ha alcanzado un punto de prestigio personal y profesional que ya no se perderá fácilmente. ¿A qué tienen miedo?.

Que bonito hubiera sido que por ejemplo la Sra. Aguilar (Ministra de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino) hubiera mostrado su firme convicción para acabar con el Toro de la Vega. Si le parece tan salvaje, y aunque las competencias actuales sean de Cultura, se podría haber comprometido a dejarse el ultimo aliento para que el año que viene no le volvieran a mostrar las mismas imágenes. Una persona con la experiencia y la carrera política de Rosa Aguilar debería haber dado un paso adelante. 

Rosa Aguilar. Jurando como Ministra del Gobierno de España

Lo mismo puedo decir de muchos otros. Creo que por lo menos podrían dar la cara y decir porque no hacen nada para evitar esta vergüenza nacional. No nos queda más remedio que pensar que la carrera política se hace a fuerza de medrar y de no enfrentarse con nada ni nadie que no interese aunque para ello se deban traicionar los principios personales. Así nos va.

Angeles González-Sinde. La Ministra de Cultura del Toro de la Vega 2011

Ellos, en la soledad de sus pensamientos deberán evaluar que hacen y quién son. Para mi son culpables del espectáculo del Toro de la Vega. No lancean ni descabellan, pero apartando la mirada se convierten en actores de este teatro de sangre.

La segunda cuestión a considerar es la trascendencia que este asunto tiene para todos aquellos que de una forma u otra estamos involucrados en causas más o menos perdidas, como es la protección animal o muchas otras.

Conocemos a una familia en la costa Mediterránea que tiene algo así como un albergue para aves exóticas, sobre todo Loros. Hace tiempo que no hablamos con ellos, pero son una adorable familia que adoptó un perro que nosotros tuvimos en acogida hace ya unos años. Cuando estuvimos con ellos nos explicaron su labor con los pájaros y nos pareció algo admirable que nosotros desconocíamos. Los Loros son una especie que sufre mucho el abandono, entre otras cosas porque como poca gente sabe, pueden vivir cincuenta o sesenta años y eso en nuestra sociedad es sinónimo de abandono... Esta gente trabajaba en un problema real, pero que por ser silencioso y desconocido debía ser explicado. Lo mismo en su medida podemos decir de el problema de los perros de guarda, de las rehalas de caza mayor o de la caza con galgos. Son causas, que aunque justas y claras, en muchas ocasiones han de ser explicadas a la población, problemas silenciosos fuera del alcance de aquel que nos los vive de cerca.

El Toro de la Vega es el símbolo de la lucha en protección animal en España, no tiene que ser explicado a nadie, no hace falta que se diga nada acompañando las imágenes, es lo más claro y palmario que nuestra sociedad muestra al mundo. Persecución, linchamiento, lanzas, tortura, la masa deseando sangre y sufrimiento y finalmente agonía, muerte y vítores al verdugo. 

En estos días  me vienen a la mente las palabras de Rick O´Barry en el final de The Cove:

"Si no podemos detener eso,

si no podemos enmendar eso,

olvídense de problemas mayores,

no hay esperanza"

El Guadiana y la traílla